Casita infantiles EXIT Yuki

Dos modelos: una casita de juguete a nivel del suelo o una casita infantil con tobogán

La casita Yuki está disponible en un modelo a nivel del suelo, así como en un modelo sobre patas con tobogán. Gracias a su tamaño compacto, la casita Yuki también puede utilizarse como una acogedora cabaña para usar en el interior. Así tendrás una auténtica casita de juguete en tu propia casa. Con la Yuki 300 la diversión alcanza niveles insospechados, gracias a sus peldaños y su tobogán que ofrecen infinitas posibilidades de juego.

Una tienda de campaña y una casita de juguete en una sola estructura

La lona verde de la casita de juguete Yuki convierte la estructura de madera en una acogedora tienda de campaña, perfecta para jugar derrochando imaginación. Las puertas de la tienda pueden enrollarse hacia arriba, por ejemplo, para un pícnic, o cerrarse con el cierre magnético, para una confortable fiesta de pijamas. Gracias a su tejado puntiagudo y su aspecto natural, las casitas infantiles se adaptan a cualquier jardín y la casita Yuki añade un toque lúdico a cualquier ambiente interior.

Casita de juguete sostenible: reparable y reciclable

Hemos desarrollado las casitas infantiles Yuki de acuerdo con nuestra filosofía sostenible EXIT. Así, estas casitas de juguete son, por ejemplo, 100 % reparables. Esto significa que todas las piezas pueden sustituirse. Las piezas pueden pedirse durante al menos cinco años después de la compra. A esto hay que añadir que estas casitas de juguete se pueden reciclar casi en su totalidad, ya que en su fabricación se han utilizado principalmente monomateriales. Se trata de materiales compuestos por una sola materia prima. Son más fáciles de reciclar porque no es necesario separar las materias primas.

La lona verde es resistente a los rayos UV, por lo que la casita de juguete Yuki puede quedarse al sol sin ningún problema. Además, las casitas infantiles están fabricadas con madera de ciprés de alta calidad certificada FSC® (FSC 100 %, SCS-COC-007799). Este tipo de madera es naturalmente resistente a los fenómenos meteorológicos, como la lluvia, el sol y la nieve.